Con dolor no puedo razonar...
Hoy ha sido un día raro, no ha pasado nada demasiado trascendente, pero la apatía reinó en mi cabeza ya en la madrugada. No estoy bien, esa es la verdad. Me siento abrumada por acontecimientos que son tan cotidianos que me espantan. Siento también una incertidumbre que se me agarra a las entrañas. Estoy en tránsito, no sé como voy a canalizar esta especie de agonía. Lo peor de todo es el disimulo, el no poder más que en estos momentos contarlo o incluso contármelo a mí misma. Soy una persona que no manifiesta lo que le pasa hasta que no lo he asimilado, incluso resuelto, y claro, suelo emplear el sentido del humor, para vengarme de mi misma. No cuento con nadie, porque me aterra mostrarme. Hoy me he visto en la obligación de apartar algunas miradas y esquivar algunas preguntas, que sé de sobra son sinceras. Y es que yo, no podía serlo.
Mis armas indispensables: la imaginación y el sentido del humor, me están fallando. Lo que me pasa les impide intervenir. He de meditar sobre esto; mañana será un día en el que me voy a dedicar tiempo. Necesito tranquilizarme, sosegarme... Necesito concentrarme en quien soy, y si realmente quiero seguir siendo esta persona, porque reafirmarme me duele y con dolor no puedo razonar...
Comentarios
como una barca a la deriva,
la vida lleva y trae, y lo que hoy es un problema enorme, mañana parece más pequeño.Además de vez en cuando conviene parar, y mirar dentro y fuera y otra vez dentro y ver luz y oscuridad y luz y elegir y resolverse y revolver y hasta patalear...
Abrazos.
Te abrazo sentida
Y ya sabes estoy disponible para ti siempre
un fuerte abrazo